Ángel Gabilondo Pujol,
Nuevo Ministro de Educación y Universidades
Así es. Lo ha conseguido. En su escalada hacia un puesto político, Gabilondo supo bien los principios que le permitirían pasar a ser el Gran Ministro Salvador del Plan Bolonia:
-ejemplificar sus buenas intenciones mercantilizando la Universidad Autónoma de Madrid, como Rector de la misma (quien quiera comprobarlo, en su propia página www.uam.es, en la sección Empresas e Instituciones, hay una buena muestra de ello; pasen y vean: Fundación General de la UAM, V Foro de Empleo, Federación Empresarial Madrid Norte... después échenle un vistazo a los vocales del Consejo Social, organismo que decide los presupuestos de la U.A.M., y aten lazos...).
-dirigir a los demás Rectores por el mismo camino, como Presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas, aplicando la misma política de imposición de las empresas en el resto del estado; a través de este puesto, también tuvo el valor de justificar el brutal desalojo del Edificio Histórico de la Universidad de Barcelona el pasado 18 de marzo, que se tradujo en una jornada de represión en la que los Mossos de Esquadra dejaron cerca de un centenar de heridos y decenas de detenidos
-aplicar la política gubernamental de desinformación y desatención a las reclamaciones de estudiantes y profesores, aprobando a escondidas los cambios que convertirán a la UAM en una universidad adaptada al Espacio Europeo de Educación Superior (como la nueva Normativa de Permanencia, que reduce a 2 el número de matriculaciones máximas por asignatura, y ante la que los estudiantes exigieron, con mil firmas en la mano, postergar la aprobación de la misma hasta que se hubiese informado a la comunidad universitaria...no le pareció aconsejable).
-su currículum como experto negociante en estos tiempos de subasta de la educación superior está acreditado por sus numerosas reuniones con Emilio Botín, que han dado como resultado otros tantos acuerdos y convenios entre el Banco Santander, mediante su sección de compra-venta de la educación, el grupo Universia, y las Universidades Públicas. Si a esto le añades ser el hermano de Iñaki Gabilondo, presentador de los absolutamente-independientes (para lectores despitados: denótese la ironía) telediarios de Cuatro, tu futuro político queda asegurado entre las filas del PSOE gracias a las buenas y convenientes relaciones con el Grupo Prisa (que tampoco tiene nada que ver con la existencia de las cátedras UAM-El País y UAM-Jesús de Polanco)
-eso sí, Gabilondo justifica y siempre justificará sus acciones en base a las vías democráticas: mientras tildan de antidemocráticas las exigencias estudiantiles de abrir un proceso de debate y de transparencia informativa en torno a la nueva reforma educativa, hablan de representitividad de la comunidad universitaria en los órganos de gobierno. Sólo daré un dato: Ángel Gabilondo Pujol fue reelegido Rector de la U.A.M. en 2006 con los votos del 4,72% de los/as estudiantes de la U.A.M.
Efectivamente, nadie mejor que Ángel Gabilondo Pujol para terminar de aplicar los planes mercantilistas que harán de nuestras Universidades un instrumento más de empresarios y banqueros, aquellos que no supieron gestionar su propio mercado y por culpa de quienes ahora nos encontramos inmersos en su propia crisis. El próximo 22 de abril la Asamblea de Estudiantes de la U..A.M. ha acordado un debate en el que participará el nuevo Ministro de Educación y profesores y estudiantes a favor y en contra de la aplicación del Plan Bolonia. Aquellos que llevamos años comprobando cuál será la realidad de esta reforma (en base a los textos legales y normativos que dan forma al E.E.E.S. en nuestras Universidades) ansiamos que llegue dicho debate, para mostrar una vez más que ni la demagogia ni los asesores que a partir de ahora entrenarán a Gabilondo le permitirán dar respuesta ni justificación a las fundamentadas e innegables críticas y repulsas a la implantación de los intereses de Mercado en el ámbito de la educación superior.
Amén.
ResponderEliminarSi te fijas, es el estilo del gobierno este: se nombran ministros "de parte" con un discurso de mediación entre colectivos.
Es un descojone que un tipo de la trayectoria de Gabilondo vaya a negociar la aplicación de Bolonia ahora en el ministerio, cuando, como rector, ha apoyado todo cuanto le han mandado.
Respecto a González-Sinde y las trifulcas SGAE vs. internautas, más de lo mismo...
La única esperanza es Salgado. Si es la mitad de intervencionista en economía que en los asuntos en que no debía serlo (tabaco), vamos hacia un modelo de planificación (quinquenal).